Ayer me levanté tarde, con mucha pereza y pocas ganas de "salirle al astro", como dice mi mamá. Desayunamos y F. se fue a trabajar, la manada se dedicó a sus actividades normales. Yo me duché y me senté en la compu a responder mails y trabajar.
Vivimos en un apartamento que queda en un primer piso... justo frente a la caminería que da a la entrada del edificio. Más de una vez he escuchado las conversaciones de la gente que viene y va hablando a todo volumen.
Hoy, en medio de la teoría y práctica de probabilidades, escucho un estruendo impresionante: "¡¡CATAPLÚN!!" Sonó como una enorme caja de vajilla que se hubiese precipitado al piso. Se hace un silencio, ni los pajaritos se escuchan... yo pienso *auch* y sigo en lo mío. Un rato después, escucho a dos vecinas justo bajo la ventana:
-¡Ay Dios mío! Mira...
-¡Viste!
-aaajjjjjhhh!!!
Saliendo por completo de mi concentración: *mmm?*
-Dios mío está saliendo humo!! Mira!!
-Está saliendo humo!!
-Está saliendo humo, aaajjjjhhhh!!!!
-Está saliendo humo...
voz infantil: -Se va a quemar el edificio y se va a morir todo el mundo!!
-AAAAJJJJHHHH!!!
Yo observo a mi alrededor y pienso: *Bueno, si es cierto que los animales presienten y son sensibles a esas cosas, aquí viven tres desnaturalizados*. Pasan unos minutos:
-Miiiira, miiiiira lo que te dije, está saliendo un humeeeeeero!! Se está quemaaaaando!!
-aaaajjjhh!!
-Es en el piso catorce! Se va a quemar toda la azotea!!
*Uy... en el piso 14 vive una señora que siempre tiene como seis niñitos, porque ella los cuida de día... mejor me voy a avisarle!!"
voz de la señora que cuida los niñitos: -¿Qué están mirando?
*No hay necesidad de que me levante*
-Ay mija! Que se quema! Que se está quemando! Mira ese humero!! Y es en el piso 14!!
-aaaajjjhhh!!
... ... ...
Pasan otros minutos y todo indica tranquilidad. Los pajaritos están cantado como siempre y no veo nada fuera de lo normal. Pero el grupito de vecinas sigue en pleno, incluso la vecina que está arriba en diagonal se une a la conversación desde su ventana... todas hablan más o menos de lo mismo, con los respectivos "aaaajjjhhh!!!". Entre ellas se mezcla la voz infantil, que ya pude identificar como la hija de una de las vecinas emblemáticas del edificio: parece un pavo contoneándose con su hijita, que es como un apéndice de ella y tiene como una mira láser que te evalúa de arriba abajo y, para rematar... se queda con cara de rana arborícola cada vez que me ve con F. y deja escuchar el siseo de sus comentarios con quien sea que esté con ella cuando pasamos. Claro, seguro lo hace con toda la población del edificio... pero igual es desagradable.
... ... ...
Pasa un largo rato en que se repiten los mismos comentarios... de entre ellos alguien concluye que no es el piso 14, sino el 13. Llegan los bomberos y alguien viene a comentar que fue un calentador que explotó y está quemando todo el apartamento. *Caramba, me digo, esto es bien serio...* Alguien se deshace en un discurso sobre los calentadores, cómo funcionan, las señales de envejecimiento de un calentador. Alguien más cuenta lo que le pasó a la hermana de la ahijada de su abuelita en el 73 con un calentador y otro se pone a hablar de las telas de cortinas que son más inflamables. A estas alturas, me estoy preparando el almuerzo, pues con tanto revuelo no me puedo concentrar. En eso un bombero grita a todo pulmón desde abajo:
-Rescate atención, tenemos una comisión!!
Se escucha un grito doce pisos arriba (cálculo mío): -¿Qué pasó?
-Rescate, tenemos un herido. ¿Ya terminaron allá arriba?
Del otro lado se escucha muy bajito "aaajjjjhh!!" y el cuchicheo de los vecinos. Puedo imaginarme a la rana arborícola a punto de un colapso...
-Dale tranquilo, nosotros ya vamos.
Cesan los comentarios, más tarde alguien dice que sale menos humo que antes y otro pregunta suspicaz "¿Ya entraron en el apartamento? ¿Reventaron las cerraduras?" Otro dice, "¿Y quiénes viven allí?" Se arma un chismoreo sobre la vida de los afectados entre el grupito de vecinos y la nena dice alguna barbaridad, que seguro la hizo ganarse un pellizco de aquellos, pues al segundo de escucha un berrido. Pasan unos 10 minutos, el grupo se ha disuelto y la nena todavía lloriquea... Finalmente el camión de bomberos se va con sus respectivas sirenas y cornetazos.
... ... ...
Cuando termino de almorzar, se escucha la voz característica de la conserje que pasa por ahí y consigue a otro vecino: "Ay señor Z , ¿no supo lo que pasó? El muchacho de la familia Ñ, que vive en el piso 13 dejó la cocina prendida y se le quemó todo!! Hasta se le cayó el gabinete de la cocina!!... Usted sabe quién es es muchacho? no? Es aquel blanquito que tiene un carro amarillo y que se lo chocaron cuando salía con la hija de la viuda del 2...
Vivimos en un apartamento que queda en un primer piso... justo frente a la caminería que da a la entrada del edificio. Más de una vez he escuchado las conversaciones de la gente que viene y va hablando a todo volumen.
Hoy, en medio de la teoría y práctica de probabilidades, escucho un estruendo impresionante: "¡¡CATAPLÚN!!" Sonó como una enorme caja de vajilla que se hubiese precipitado al piso. Se hace un silencio, ni los pajaritos se escuchan... yo pienso *auch* y sigo en lo mío. Un rato después, escucho a dos vecinas justo bajo la ventana:
-¡Ay Dios mío! Mira...
-¡Viste!
-aaajjjjjhhh!!!
Saliendo por completo de mi concentración: *mmm?*
-Dios mío está saliendo humo!! Mira!!
-Está saliendo humo!!
-Está saliendo humo, aaajjjjhhhh!!!!
-Está saliendo humo...
voz infantil: -Se va a quemar el edificio y se va a morir todo el mundo!!
-AAAAJJJJHHHH!!!
Yo observo a mi alrededor y pienso: *Bueno, si es cierto que los animales presienten y son sensibles a esas cosas, aquí viven tres desnaturalizados*. Pasan unos minutos:
-Miiiira, miiiiira lo que te dije, está saliendo un humeeeeeero!! Se está quemaaaaando!!
-aaaajjjhh!!
-Es en el piso catorce! Se va a quemar toda la azotea!!
*Uy... en el piso 14 vive una señora que siempre tiene como seis niñitos, porque ella los cuida de día... mejor me voy a avisarle!!"
voz de la señora que cuida los niñitos: -¿Qué están mirando?
*No hay necesidad de que me levante*
-Ay mija! Que se quema! Que se está quemando! Mira ese humero!! Y es en el piso 14!!
-aaaajjjhhh!!
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Pasan otros minutos y todo indica tranquilidad. Los pajaritos están cantado como siempre y no veo nada fuera de lo normal. Pero el grupito de vecinas sigue en pleno, incluso la vecina que está arriba en diagonal se une a la conversación desde su ventana... todas hablan más o menos de lo mismo, con los respectivos "aaaajjjhhh!!!". Entre ellas se mezcla la voz infantil, que ya pude identificar como la hija de una de las vecinas emblemáticas del edificio: parece un pavo contoneándose con su hijita, que es como un apéndice de ella y tiene como una mira láser que te evalúa de arriba abajo y, para rematar... se queda con cara de rana arborícola cada vez que me ve con F. y deja escuchar el siseo de sus comentarios con quien sea que esté con ella cuando pasamos. Claro, seguro lo hace con toda la población del edificio... pero igual es desagradable.
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Pasa un largo rato en que se repiten los mismos comentarios... de entre ellos alguien concluye que no es el piso 14, sino el 13. Llegan los bomberos y alguien viene a comentar que fue un calentador que explotó y está quemando todo el apartamento. *Caramba, me digo, esto es bien serio...* Alguien se deshace en un discurso sobre los calentadores, cómo funcionan, las señales de envejecimiento de un calentador. Alguien más cuenta lo que le pasó a la hermana de la ahijada de su abuelita en el 73 con un calentador y otro se pone a hablar de las telas de cortinas que son más inflamables. A estas alturas, me estoy preparando el almuerzo, pues con tanto revuelo no me puedo concentrar. En eso un bombero grita a todo pulmón desde abajo:
-Rescate atención, tenemos una comisión!!
Se escucha un grito doce pisos arriba (cálculo mío): -¿Qué pasó?
-Rescate, tenemos un herido. ¿Ya terminaron allá arriba?
Del otro lado se escucha muy bajito "aaajjjjhh!!" y el cuchicheo de los vecinos. Puedo imaginarme a la rana arborícola a punto de un colapso...
-Dale tranquilo, nosotros ya vamos.
Cesan los comentarios, más tarde alguien dice que sale menos humo que antes y otro pregunta suspicaz "¿Ya entraron en el apartamento? ¿Reventaron las cerraduras?" Otro dice, "¿Y quiénes viven allí?" Se arma un chismoreo sobre la vida de los afectados entre el grupito de vecinos y la nena dice alguna barbaridad, que seguro la hizo ganarse un pellizco de aquellos, pues al segundo de escucha un berrido. Pasan unos 10 minutos, el grupo se ha disuelto y la nena todavía lloriquea... Finalmente el camión de bomberos se va con sus respectivas sirenas y cornetazos.
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Cuando termino de almorzar, se escucha la voz característica de la conserje que pasa por ahí y consigue a otro vecino: "Ay señor Z , ¿no supo lo que pasó? El muchacho de la familia Ñ, que vive en el piso 13 dejó la cocina prendida y se le quemó todo!! Hasta se le cayó el gabinete de la cocina!!... Usted sabe quién es es muchacho? no? Es aquel blanquito que tiene un carro amarillo y que se lo chocaron cuando salía con la hija de la viuda del 2...
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A mi mente vino como un relámpago esta tira de Quino, que les dejo como regalo, por haberse calado mi chismorreo virtual... Saludos!
9 comentarios:
Te ha tocado...quieres participar?
Me gusta me gusta. Me gusta ;-). y mira que soy dura, eh ?
No entendí, ¿acaso sabían que impuestos internos les tendía una trampa...?
Hola, que interesante y confortante estar en este jardin, pues que cosas asi suele ser la vida con los vecinos que no tienen nada mejor que hacer en la vida.
Por cierto me dejaste con la boca abierta "animales desnaturalizados", ese es el titulo de tal vez el mejor libro que eh leido.
Lo que entretienen los chismes, a unas personas mas que a otras :D
Hola Caline.
Si te das cuenta estamos llenos e señales, el que esta al lado y nos mira_es por algo, si laguien te pregunta la hora _ es por algo, si los perros ahullan _ es por algo, pero si la gente habla, te aseguro que es por algo.
Y que delicioso es hablar de alguien, pero que no sea de uno mismo.
El barrio, el vecindario, los edificios, los vecinos, todos compartimos nuestras vidas indirectamente y uno debe ser lo mas parco y discreto con la suya, para que no se convierta en tema de la semana.
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Respecto a tu comentario. La caverna de Saramago, habla sobre esa nueva relaidad que estamos construyendo en esos centros modernos que nos provesionan todo (mall, supermecados, cenros comerciales), y somos la generación que vive esa transición.
Los mercados en lo urbano ahan perdido su sentido rural.
Un abrazo, y por cierto un saludo a tus vecinos.
Chao
Holis... este post todavía me produce sentimientos encontrados, jejeje... porque no estaba muy segura de escribirlo. No quería "pasarme de chismosa", pero me tenían reventada con esa bendita conversadera, no me dejaron trabajar!!
Cabina: ya cumplí.
empiezo a entender: bienvenida, pasa cuando quieras!
Clérigo: No entendí tampoco ;-)
Soltero maduro: ven cuando quieras, eres bienvenido!
Ex-lvna: Es un placer tenerte por aquí, me dejó pensando tu blog.
Nenya: Gracias por venir, eres un dulce!
rafico: estamos de acuerdo... de hecho sólo hablo con mi vecina de enfrente que tiene como 84 años y porque es amiga de mi mamá... el resto de las 56 familias que viven aquí... con el "buenos días/noches" y "hasta luego" ya es mucho... caer en la boca de la gente es lo peor y mi mamá me mata si pasa, jejeje... a ella sí le importan esas cosas.
Saluditos!!
Me he reido de buena gana con esto Caline.
Pensar que en todos lados pasa lo mismo.
Al final ni te moviste y conociste la vida de todo el edificio.
Describes a las personas y los hechos con tanto realismo que puedo hasta sentir la mirada de la mujer con la niña.
Saludos, siempre es un gusto sentarse a descansar en el jardín.
todavia me estoy riendo! jejejejejejjeje
Santa mía, que lío vivir entre tanta gente!
Ahora, vos tenes sangre en las venas? yo si se que algo se esta quemando cerca de mi huyo como una cobarde hasta que pase el peligro! jejejeje
Disculpame por no pasar antes, es que he tenido unos dias un poco entreverados.
Un abrazo querida!
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