martes, agosto 28

Lluvia sobre mi jardín

Hasta hoy, hemos tenido dos semanas de lluvias!! Ni qué decirles de mis salidas con Thor en nuestros respectivos impermeables, porque la lluvia simplemente no para.
La semana antepasada regresé a mi curso de inglés, para encontrarlo mejorado!! Estoy flotando de la emoción, otra vez dedicada al inglés y sacando tiempo para el trabajo, las mascotas, la lectura, el bordado...
¡Todo está bien, todo va muy bien!
Paralelo a las lluvias, estas semanas he estado escuchando en el carro las mismas ocho o diez canciones que todas las emisoras tienen en rotación. Esto conlleva a que muchas de esas canciones se convierten en una tortura que nos persigue y cuesta sacárnosla de la cabeza.
Esta vez tuve una gratísima sorpresa con la bendita canción del "paraguas" o la "sombrilla", que me empezaba a estresar. Primero porque no es el tipo de música que me gusta y segundo porque parece una cantaleta que me recuerda que sólo tengo uno inmenso y poco práctico que nunca uso.
La canción del paraguas es esta:

...y la que reivindicó a la canción del paraguas es la misma canción, pero con una intérprete diferente. Me hizo emocionarme con la letra, porque antes no la entendía y ha terminado por alegrarme el día. Ojalá se los alegre a ustedes también:

viernes, agosto 10

De mis últimas andanzas...

Es mucho lo que ha pasado y aunque sí trabajé bastante, siempre logro ingeniármelas para disfrutar de la vida, que si no... ¿para qué vivir?

Mientras el F. estuvo aquí, compramos un carrito nuevo y ¡¡AUTOMÁTICO!! Espero que no me lancen piedras, pero después de unos cuantos (muchos) intentos del F. por enseñarme el arte de manejar un carro sincrónico, terminamos aceptando que era algo que simplemente no iba a suceder. Y mi F. de verdad que me quiere, porque terminó dando su brazo a torcer.
También fuimos a conocer al nuevo sobrino del F. y me dio mucho gusto entregarle (por fin) el cuadro con el natalicio a mi cuñada. ¿Qué puedo decir del bebo? Pues que tenía cuatro meses y parecía como de seis, tenía una sonrisa pintada en el rostro y no le gustó que el F. lo cargara, jajajaja. En fin... el bebé está bello y sano. Nos dio mucho gusto ver a mis cuñados tan felices.

En el grupo de punto de cruz hicimos el intercambio "primavera-verano" y recibí de regalo un pañito para cubrir el pan junto con un portatijeras y un alfiletero preciosos. He estado de lo más mona con ellos, aunque no he bordado mucho últimamente. En la foto también se ve un bolso de Jack, que me regaló mi F. y me hace recordar mucho a mi amiga Blanca!! A quién por cierto le dedico este wallpaper, que es igualito a ella. También a todos los invito a que pasen a ver la colección Eos de Vladstudio, que está espectacular.
Mi Za, como la ven, no pierde la oportunidad de robar cámara, aunque se nota que estaba adormilada ese día...
No he adelantado casi nada del cuadro de la dama azul que estoy haciendo, pero para que no se me oxiden las manos, hice estos dos adornitos para la puerta de dos niñas: La hija de mi padrino J. y la de mi buen amigo J.L. Me parece que quedaron bonitos y fueron muy, muy, fáciles y rápidos de hacer, así que quedé más que satisfecha.
La semana pasada le compré a Thor una cama nueva que lo tiene enamorado. La que tenía parecía ya un harapo y olía a rayos y truenos!! Lo malo de vivir en apartamento es que no tengo donde "asolear" nada. Luke de vez en cuando se acuesta tan largo cuál es en la cama y Thor sólo puede acostarse con la cabeza dentro de la cama... ¿Qué abuso felino, no?
Hoy las cosas están mucho mejor y yo me siento muy bien, totalmente recuperada de la laberintitis. Hasta regresé a mi curso de inglés... todo va viento en popa y espero que el barco del F. también... hay unos huracanes por allí... :-S

domingo, agosto 5

Laberintitis

Hasta que no lo vives, no tienes idea de lo que es...
Parece mentira, en enero me caí y me lastimé el tobillo y ahora pasé por el horror de esta enfermedad. El F. no se puede ir sin que yo me descompense de alguna manera... ¡qué bárbara!
En fin, he tenido que reposar mucho y prácticamente lo único que hecho es dormir y ver un poco de tele. Hasta que el tratamiento empezó a hacer efecto, no podía leer, ni salir, ver la compu, ni bordar... todo me daba vértigo y ni qué decir de las "excursiones" al baño, agarrada a los muebles y la pared, como si estuviese rodeada de desfiladeros sobre un piso enjabonado.
Me costaba un mundo ir a la cocina a calentar la comida y todavía más regresar a la cama para comérmela. Es insólito, pero me daba vértigo comer sentada... eso de ver la cuchara llena de sopa acercarse a mí... era peor que ir en la montaña rusa.
Ni qué decirles de mi pobre manada, siempre tan preocupada por mí, viéndome dar traspiés por la casa. Gracias a Dios que conseguí gente hermosa que paseara a Thor... pues la calle estaba fuera de mi alcance.
¿Suena dramático? Sí... pero en algún momento me sentí como Linda Blair en la cama, excepto que no era mi cabeza la que daba vueltas sino toda la habitación... ¡puaj! Menos mal que en esos momentos no recordé a David Bowie cantando aquella canción, ni a Jack Nicholson persiguiendo al niñito... de verdad que me habría trastornado de pensarlos mientras estaba mal.
Pero bueno, ya estoy mejor y aunque la medicina que estoy tomando advierte: "evítese actividades que impliquen coordinación y estado de alerta mental. Úsese con precaución en conductores de vehículo y operadores de máquinas", me despido por hoy, ¡¡pero volveré!!